Las Películas Subjetivas

19 diciembre 2005

Asesinos natos


Película totalmente experimental de Oliver Stone en lo que parece un banco de pruebas de este director sobre diferentes técnicas cinematográficas extrañas.

La película trata de una pareja de asesinos, en plan Bonnie & Clyde pero en modo sádicos, los cuales disfrutan matando, siempre dejando uno vivo para que cuente su historia y sean famosos. Dos asesinos sin escrúpulos los cuales solo sienten amor entre ellos.

Está interpretada ante todo por un magnífico Woody Harrelson, que cada papel que hace es mejor que el anterior. Increible su estética con esas gafitas redondeadas a lo Lennon, y el pelo recogido en una coleta.

Juliette Lewis está perfecta en esta película, presentando en momentos su parte tierna e inocente, y en otros su lado más macabro y loco.

También aparece Tommy Lee Jones, como un policía algo raro y exagerado.

El film es un intento de crítica, más que a la violencia, a la televisión, la cual solo busca el morbo, dando igual las vidas que haya en juego. Los dos asesinos se hacen famosos gracias a la televisión, y cuando estos son atrapados, un periodista, Robert Downey Jr (que está más loco que los propios asesinos) quiere hacerle una entrevista desde la cárcel para que cuenten que sienten al matar.

Por supuesto, la entrevista se complica, y pasa lo que pasa.

La película es difícil de digerir, es muy rara, como ya he dicho, muy experimental, incluso hay una parte en la que se pone en plan telecomedia de los 70-80, pero con un padre que abusa sexualmente de su hija, una esposa-felpudo, y un niño atormentado. Grande las risas enlatadas cuando dice "Tu te callas niño, que si no fuera porque tu padre se creía que era el cuarto de tu hermana, tú no hubieras nacido".

En definitiva, una película que a pocos gustará, aunque a mi en el fondo si me ha gustado por su originalidad. Aunque ni al propio Tarantino, que firma el guión, le gustó...de hecho quiso que se quitara su nombre de los créditos.

Lo dicho, verla si teneis un ratito, con la mente muy abierta, y sin esperar una buena historia, si no una forma original de contarla.